En España, los perros son las mascotas por excelencia. Son muchas las razas de perro que podemos ver, entre ellas el galgo y el podenco, que pueden parecer muy similares, pero, sin embargo, también tienen sus diferencias. De esta forma, si te interesa saber qué tienen en común y en qué se diferencian el galgo y el podenco, aquí te hablaremos de sus distintos rasgos físicos y de personalidad para que te conviertas en todo un experto en canes.

Principales diferentes entre un galgo y un podenco

El galgo

En primer lugar, hay que tener en cuenta que existen diferentes tipos de galgos. Tenemos el galgo afgano, el galgo árabe, el galgo azawakh, el galgo escocés, el galgo escocés, el galgo húngaro, el galgo inglés, el galgo italiano, el galgo persa, el galgo ruso, el whippet (galgo de pequeño tamaño), y wolfhound o galgo irlandés.

Sus orígenes son bastante antiguos. Y durante mucho tiempo se usaban para la caza de liebres, gracias a su velocidad, incluso también se usaban para la caza de lobos o gacelas. No podemos olvidar que son considerados los perros más veloces del mundo. Por eso, también se empezaron luego a utilizar para las carreras.

En cuanto a sus características físicas, nos encontramos con que los galgos tiene un cuerpo muy estilizado de cola a cabeza (mucho más que los podencos). En cuanto a la estatura media suelen medir entre entre 69 y 76 cm; y pesan entre 27 y 32 kilos. El hocico del galgo es más estilizado y fino, y su trufa siempre es de color negro, así como sus labios. Sus ojos tienen forma almendrada y con un tono oscuro o marrón claro. Sus cuellos son largos y las orejas las tienen dobladas por la mitad. El tórax es elevado y su manto es de colores muy variados.

En lo que tiene que ver con su personalidad: se trata de perros normalmente tranquilos y cariñosos con la familia, así como sociables con otros perros. Sin embargo, también pueden resultar bastante tímidos.

Galgo

El podenco

Al igual que en el caso de los galgos, nos encontramos con que los podencos son perros de orígenes antiguos y tradicionalmente utilizados para la caza por sus capacidades innatas. De hecho, el podenco es una raza canina capacitada para rastrear desde pequeños mamíferos como liebres o conejos, incluso hasta grandes animales como ciervos. De la misma forma, también tienen una gran predisposición para el deporte y para la carrera. 

También hay que tener en cuenta que existen diferentes variantes de podenco. Son las siguientes: Cirneco del Etna; podenco canario, podenco ibicenco, pharaoh hound y podenco portugués.

En lo que tiene que ver con sus características físicas: el podenco tiene un cuerpo menos estilizado que el del galgo; con respecto a su altura, suelen ser más altos que los galgos, aunque tampoco mucho (y el peso suele ser bastante similar); su hocico está truncado hacia la base; la trufa es pequeña también, pero en el caso de los podencos puede ser de color carne, marrón o rosado; sus ojos son de forma oblicua y de color ámbar; sus labios son finos y de color carne; el cuello es mucho menos largo que en el caso de los galgos; las orejas son puntiagudas y erguidas; su tórax es menos elevado y el manto cuenta con un pelaje de color más específico, y su vientre es menos pronunciado.

Con respecto a su personalidad: son cariñosos con la familia, amigables con los niños, muy amistosos en general y incluso con los extraños, y por tanto, mucho menos tímidos que los galgos.