El bozal suele asociarse erróneamente solo a perros agresivos, pero la realidad es que no siempre es así y de hecho este se ha convertido en un accesorio más al igual que ocurre con el collar o la correa. El bozal es simplemente una especie de ‘escudo’ para evitar que nuestro amigo peludo pueda morder a otro perro o persona, para que no se coma todo lo que encuentre en el suelo, para evitar que ladre tanto o simplemente porque en algunos casos el uso del bozal es obligatorio en España.

Esa obligatoriedad del uso del bozal la encontramos por ejemplo con los viajes en tren o en metro, en determinados lugares y espacios públicos o en el caso de que nuestro perro sea de una determinada raza considerada ‘potencialmente peligrosa’ (PPP) o porque sea de gran tamaño y tenga unas determinadas características recogidas en el Real Decreto 287/2002 del BOE. Por ello, a continuación te hablamos de las razas de perros que tienen que llevar bozal.

¿Qué razas están obligadas a llevar bozal?

Si eres un amante de los animales o estás pensando en adoptar un perro de una raza determinada es importante que tengas en cuenta cuáles son las razas que actualmente están obligadas a llevar bozal:

  1. Pitbull
  2. Staffordshire Bull Terrier
  3. American Staffordshire Terrier
  4. Rottweiler
  5. Dogo Argentino
  6. Fila Brasileño
  7. Akita Inu
  8. Tosa Inu

Otros perros que también están obligados a llevar bozal

Además de esas razas consideradas PPP y obligadas por ley a llevar bozal, esta lista puede variar en función de la Comunidad Autónoma en la que te encuentres ya que algunas también incluyen al Doberman, Presa Canario, Dogo del Tíbet, Mastín Napolitano y al Presa Mallorquín como razas peligrosas.

Además de revisar la normativa vigente en tu comunidad o municipio, también tendrás que tener en cuenta los perros que tengan cruce de alguna de las razas consideradas PPP y también los perros de gran tamaño están obligados por ley a llevar bozal. Al igual que cualquier otra raza que reúna la mayoría o todas las características que te mencionamos a continuación:

  1. El peso debe ser superior a 20 kg, la altura oscila entre 50 y 70 cm y la anchura torácita entre 60 y 80 cm.
  2. Fuerte musculatura, aspecto robusta, gran fuerza física y resistencia.
  3. Carácter fuerte, feroz y agresivo.
  4. Cabeza grande, fuerte, de frente redondeada.
  5. Mandíbula imponente.
  6. Cuello ancho, corto y robusto.
  7. Antecedentes de peleas o ataques a otras perros o personas. En estos casos, el bozal será necesario y un veterinario tendrá que elaborar un documento oficial que certifique el grado de peligrosidad del perro.

En cualquiera de estos casos tendrás que pasear a tu mascota con bozal y con una correa no extensible que no sobrepase los 2 metros de largo y que además sea resistente. De no ser así podrías exponerte a una sanción que podría ir desde los 300 a incluso los 2.400 euros.

¿Cuándo es obligatorio que lleven puesto el bozal?

Si por la raza o por cumplir la mayoría o todas las características que te hemos citado anteriormente tu perro está obligado por ley a llevar bozal, es importante que tengas en cuenta que esto no implica que tu amigo peludo tenga que llevar bozal de forma permanentemente.

Esto quiere decir que si vas a salir a pasear en un espacio público el bozal y la correa serían obligatorios y sin importar de si estos espacios están o no al aire libre. Lo mismo ocurre en los viajes en transporte público aunque en este tipo de transporte todos los perros sin distinción están obligados a llevar bozal y además se recomienda evitar horas puntas y viajar en el último vagón. Aunque en este caso es importante que revises la normativa de la Comunidad Autónoma, del municipio o de la empresa de transporte ya que pueden variar.

Recuerda también que para pasear deberás llevar a tu perro con correa, sin importar la raza o el cruce que sea. Aunque hay determinados ayuntamientos como el de Madrid que permiten que los perros paseen sueltos por los parques en horarios determinados o municipios que cuentan con recintos cerrados acondicionados para poder soltar a los perros.

¿Qué tipo de bozales son los más aconsejables?

Una vez descubras si tu perro necesita o no llevar bozal, es el momento de elegir el modelo de bozal más adecuado. Esta es una decisión importante ya que no todos los bozales funcionan de la misma forma ni son igual de beneficiosos para nuestro perro.

No podemos olvidar que aunque se trata de un elemento obligatorio y necesario para él, nuestro fiel amigo nos estará eternamente agradecido si elegimos un modelo que sea cómodo, que le permita jadear o beber agua y que esté adaptado a su tamaño.

Bozales de cesta: Estos son los más recomendados ya que cuentan con una serie de rejillas que presentan una amplitud perfecta para que nuestro perro esté cómodo y pueda jadear, algo que no siempre permiten todos los bozales y que es imprescindible para que nuestro perro pueda refrigerar su organismo y regular su temperatura corporal. En este caso tendremos que asegurarnos de elegir un modelo que se adapte al tamaño y la forma de su hocico para garantizar que no le haga ningún tipo de rozadura y pueda quedar bien sujeto.

Bozal de cesta

Bozal de cesta

Bozales de tela o de tubo: Este tipo de bozales al contrario que los anteriores dejan la boca de nuestro perro completamente cerrada evitando que pueda jadear o incluso beber, por lo que pueden llegar a perjudicarle gravemente. Por todo esto, este tipo de bozales solo son recomendable para trayectos muy cortos en los que nuestro perro no vaya a realizar ningún esfuerzo físico.

Bozal de tela

Bozal de tela

¿Cómo acostumbrarle a llevar bozal?

Si nuestro perro es un perro adulto y vas a colocarle el bozal por primera vez, te recomendamos que primero intentes que se familiarice con este accesorio en casa y veas cómo se adapta poco a poco a su uso. Pruébaselo en periodos cortos de tiempo y prémiale por ello con algún juego, paseo o golosina y nunca dejándolo solo con el bozal u obligándole a llevarlo durante muchas horas, esto además de ser peligroso para su salud, acabará haciendo que odie aún más llevarlo puesto.

Todo esto hará que tu perro lleve mejor este nuevo cambio y no lo vea como un castigo o un incordio. Si por el contrario tu perro es cachorro es importante que le acostumbres desde pequeño a ver este accesorio como algo normal, de esta manera no te costará tanto acostumbrarle de mayor.

Otro aspecto importante a destacar es que los perros no son un animal agresivo y de hecho son el mejor amigo del hombre, a lo que no pueden renunciar es a sus instintos naturales los cuales variarán en función de cómo los eduquemos. Por todo esto es vital que sin importar la raza, seamos responsables e intentemos dar prioridad siempre a la educación de nuestro can motivándole con premios, paseos y juegos o incluso si fuese necesario poniéndonos en manos de un educador canino, adiestrador o etólogo para corregir determinadas conductas.